La programación: un universo interactivo para los más pequeños

Iniciar a tu hijo en la programación no es algo muy difícil. Tal vez nos parezca un área para adultos, pero los niños fácilmente pueden familiarizarse con este mundo si son bien estimulados.
Los niños entre 3 y 5 años ya se encuentran en una edad apropiada para iniciarse en la programación. A esta edad cualquier objeto, herramienta o juego les despierta interés. Por eso, mostrar la programación como un juego o un objeto para el disfrute es la mejor manera de iniciarlo.
¿Pero cómo iniciar en la programación a niños pequeños que a veces ni siquiera saben leer ni escribir? Más que crear su propio código, el objetivo es iniciarlos en el mundo de la programación a través de juegos y con la diversión. La mejor forma que un niño aprenda casi cualquier tema es jugando.
Ni robot ni programación
Si los niños aún no leen ni escriben, las herramientas a utilizar no estarán vinculadas con elementos puramente de código. Incluso sin utilizar computadores o tablet, se pueden implementar pequeños juegos o ejercicios para iniciar al niño con el código.
Por ejemplo, juegos donde hay que resolver un puzzle o donde hay que hacer que un personaje consiga un objetivo.
Debe primar la manipulación de materiales fomentando la creatividad y la percepción espacio-temporal. A medida que el niño crece y se familiariza con la dinámica de la robótica aumenta la dificultad de los retos planteados.
Recursos para iniciar a tu hijo en la programación
Para incentivar la programación existen distintas herramientas diseñadas específicamente para explotar las capacidades propias de cada edad para desarrollar la programación. Muchas de ellas están disponibles gratis en internet.
1. Librerías
Puedes usar librerías físicas y virtuales que cuentan con libros y cuentos para los pequeños. Estas pueden ayudar a que se desarrollen conocimientos y actividades sobre la programación.
2. Aplicaciones y programas
Puedes usar aplicaciones y programas que sirven para iniciarse en la programación. Así, aprenderá a realizar circuitos eléctricos o maquetas en 3D. También hay algunas que enseñan a programar de forma sencilla. Por ejemplo, plataformas como Scratch o Code.org. Las aplicaciones son diseñadas en relación a la edad de los niños o adolescentes.
3. Experimentación
Existen dispositivos físicos construidos como producto de la programación robótica y para estimular su desarrollo en niños, jóvenes y adultos.
Si se utiliza un robot o alguna herramienta tecnológica (algunas no necesariamente costosas como tarjetas con instrucciones), un ejercicio ideal es ponerles a los mandos de un robot que deberá partir de un origen y llegar a un determinado destino físico; por ejemplo, desde una habitación hasta la cocina.
Conocer el “universo” de la programación
La enseñanza de la programación debería tener como objetivo mostrar todo el “universo” de la computación. Que lo conozca, que juegue. Si no les gusta, se deja y a otra cosa. Si les gusta, es una opción para empezar desde sus primeros años.
En cambio, cuando la lectoescritura ya está afianzada, se abre la puerta a utilizar herramientas mucho más potentes. A partir de los 7 años podemos utilizar la programación para promover varias de las inteligencias múltiples, principalmente la lingüística, la lógico-matemática y la espacial.